Los cines Roxy se convertirán en un supermercado

Se acabó el misterio sobre el futuro para el número 123 de Fuencarral: el local que albergaba los antiguos cines Roxy se convertirá en un supermercado cuando acaben sus obras de remodelación,. Así lo confirma un cartel colocado en las instalaciones que llevan ocupando las aceras de la calle desde que comenzaran las obras, a principios del año 2019.

La marca Aldi es la que se establecerá en esta privilegiada localización, convirtiéndose en el supermercado de mayor tamaño de la zona y el más cercano a los barrios de Malasaña y Chueca, donde no existen instalaciones de este tipo y abundan los minimercados y las tiendas de alimentación. Su presencia en la calle Fuencarral completa la llegada en los últimos años de otras marcas como Mercadona o Carrefour, que se establecieron alrededor de la glorieta de Quevedo.

Lo que falta por conocer es si el nuevo supermercado se extenderá en la totalidad de superficie comercial que se construye después de tirar abajo los cines Roxy: 3.965 metros cuadrados distribuidos en dos locales y cuatro alturas, como avanzó Somos Chamberí hace año y medio.

El proyecto que permite este cambio de uso en los cines Roxy fue aprobado por el Ayuntamiento en el año 2015 -con los votos de Ahora Madrid y del PP- a través de un plan especial para la conversión de los cines en locales de uso terciario. Entonces el PSOE entonces denunció que se construiría allí un supermercado, aunque este extremo nunca fue confirmado en ningún momento por la empresa Gorbea Arrendamientos, la compañía propietaria del edificio que controla la familia Hernández-Beitia. Estos antiguos empresarios de cines en Madrid transformaron su modelo de negocio a la gestión de activos inmobiliarios y alquiler de oficinas, aunque todavía gestionan otras salas de la capital, como los Floridablanca, los Retiro o los Princesa.

En Fuencarral, mantuvieron abiertos los Roxy hasta el año 2013. La sala A databa del año 1953 y finalizó sus proyecciones un año antes. La B abrió en el año 1996. Ambas formaban parte de una de las concentraciones cinematográficas más importantes de Madrid, las de la zona Fuencarral-Bilbao-Luchana. Hoy allí solo quedan abiertos los Cines Paz (que cumplieron 75 años recientemente), los Proyecciones y los Palafox, que reabrieron hace unos meses como multicines de lujo.